Opinión

REELECCIÓN COMPLICADA

TAREA POLÍTICA

José Luís Santana Ochoa

La que busca el Secretario General de la Sección 30 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), Héctor Pizano Larios, de quien sus representados dicen  que nunca vieron que los defendiera con decisión y contundencia ante los abusos de los últimos dos titulares de Dependencia: Ignacio Federico Villaseñor Ruiz y Miguel Becerra Hernández. Ahora que de nuevo les pide sus votos, aquellos le reclaman que, como su dirigente, no veló  por su seguridad laboral e integridad física como cuando, por ejemplo, personal médico del Hospital Regional Universitario fue agredido por el violento “fifí” Eduardo Audrey Palomino Castro.

Las carencias de los hospitales, centros de salud y programas de prevención sanitaria a cargo de la SS y BS que han sido la constante en los últimos tres años, no sólo han afectado a la población sino también a los trabajadores de la salud que son los que dan la cara y le ponen sus pechos a los airados reclamos de la gente que no es atendida como se debe porque no hay tomógrafo, servicio de laboratorio, abasto oportuno de medicamentos y material de curación, nunca le quitaron el sueño a Pizano Larios, al decir los mismos que la contienda sindical anterior lo respaldaron para que llegara a la Secretaría General de la Sección 30 del SNTSA , y quien al callar respaldó al titular de la SS y BS  en turno y no a sus compañeros trabajadores como debió haberlo hecho.

A pesar de que el propio Becerra Hernández terminó reconociendo su incumplimiento de los pagos al personal regularizado y nunca negó su comando de una nutrida fuerza aérea con cargo a la nómina de la SS y BS, ni tener a cuates suyos de asesores y otras prácticas de corrupción, el dirigente sindical que ahora pretende reelegirse nunca le protestó, por eso se le complica que  le crean que en esta su segunda vez ya no será tapadera del Secretario sino férreo defensor de los trabajadores de la salud. Sin embargo, está en todo su derecho de hacer el intento por aquello de que no hay peor lucha que la que no se hace.

“Nada ha pasado, todo sigue igual como cuando estaban Carlos Salazar Silva e Ignacio Federico Villaseñor. Los males e irregularidades administrativas, vicios y corruptelas, no sólo persisten, aumentan. Becerra Hernández ha sido incapaz de generar acción, iniciativa, gesto o algo que se asemeje o denote simple interés ya no por resolver sino al menos atender la problemática administrativa, financiera y de servicios en la que se encuentra sumida la SS y BS”, denunciaron en su oportunidad trabajadores afiliados a la Sección 30 del SNTSA  ante la pasividad cómplice de su dirigente Héctor Pizano Larios.

Como en política sindical también los vacíos que dejan los dirigentes permisivos se llenan, en este caso quien los ocupó fue  la dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) y dos veces Secretaria General de la misma Sección 30 del SNTSA,  Dolores González Meza, quien  a diferencia de Héctor Pizano Larios sí denunció “el desorden administrativo” que ha propiciado corrupción, ineficiencia e impunidad en perjuicio del pueblo-pueblo, en los vitales servicios que la SS y BS tiene encomendados. “Se tiene que tener un enfoque muy especial hacia la Secretaría, porque no estamos bien, hay un desorden administrativo al interior y creo que eso es una prueba de que quienes están dirigiendo no están echándole todos los kilos”, disparó certera.

EL ACABO

*Serán los trabajadores afiliados a la Sección 30 del SNTSA, nadie más, quienes con sus votos decidan el lunes 25 de Marzo de 2019 si le dan una segunda oportunidad a Héctor Pizano Aguilar o una tercera a Dolores González Meza. En tanto, ambos estarán sujetos al escrutinio de sus propios camaradas y de la opinión pública. El tema es de interés general por sus implicaciones para el Sector Salud en el estado.

 

 

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