Opinión

DE LA ANTIGUA POLÍTICA DE AUSTERIDAD AL CONTEMPORÁNEO SUELDAZO

Observador Político

Belisario Romero Sánchez

<< POR SI DESCONOCÍA  ESTO LA NUEVA GENERACIÓN DE POLÍTICOS>>

Nuestros antiguos políticos, allá por la década de los 90’s, en México, Colima y en la mayor parte de los municipios era el PRI el que gobernaba, a duras penas por ahí se colaba uno que otro regidor de oposición en los cabildos, mientras que en los congresos apenas llegaba un diputado de oposición por la vía plurinominal, por lo que las mayorías priistas eran aplastantes y la poca oposición que tenían, si figuraban. (Incluso en el año dos mil, el congreso sólo contaba con aproximadamente  19 diputados, pero como Fernando Moreno Peña perdió mayoría cuando ganó la gubernatura aumentó el número de pluris para contar con ella y así quedó con 25  legisladores hasta la fecha)

Cierto día me platicó un  político de esa generación, que en ese entonces ir en contra del PRI era casi como firmar tu sentencia de muerte, eras perseguido, nadie quería ser de oposición para no perder “amistades, trabajo o negocios”.

Me comentó que una de las muchas  propuestas que defendieron los opositores, era precisamente que los regidores y diputados locales no se incrementaran el sueldo( desde luego haciendo cada quien lo que le correspondía desde su espacio político),  por eso a toda costa los tricolores les obstaculizaban los triunfos electorales para que el tema de la reducción del salario, entre otras propuestas favorables no fuera una realidad, pues por lo que ya vimos, proyectaban aumentarlo.

También comentó que en esa época un regidor en Tecomán,  ganaba de 3 a cinco mil pesos por quincena, y para ahorrarse el gasto de combustible, el ayuntamiento  les asignaba una camioneta  que para usarla  tenían que coordinarse, y  tenían que comprobar que iban a asuntos meramente de sus comisiones, la gasolina era controlada y se les asignaba de acuerdo a la distancia.

Era tanta la «pichicatería» que ser de oposición, era casi pagar con recursos propios mantenerse en el cargo, al grado de que se les tenía que rogar para que participaran en alguna candidatura, despreciaban la invitación debido a que no era rentable, mucho menos negocio encabezar un proyecto político que no fuera del PRI, pues ni como regidor recuperarían el dinero invertido en la campaña.

Aunque obviamente, al igual que hoy en día, ese “apretón de cinturón” solo se aplicaba a los regidores de oposición, que los castigaban con tal de no hacer proselitismo ni figurar políticamente con recursos públicos, pero no se aplicaba la misma dosis para los de casa, para los priistas, que éstos hasta asistentes tenían, no se diga  espacios en las instituciones de gobierno para acomodar a los amigos y los compadres como pago de favores políticos.

Pero como todo por servir se acaba, se acabaron los espacios y el dinero con tanto saqueo de los recursos públicos que se robaron a diestra y siniestra, lo único que les quedó hoy en día es el sueldazo, los moches y los negocios millonarios a través de presta nombres.

En síntesis, lo que por tantos años impulsó y defendió esa generación de auténticos políticos opositores al sistema represor priista, que sus ideales era dejarles un mejor país y futuro a sus hijos y nietos, que abrieron brecha para que hoy llegara a gobernar la oposición, y que lo que tantas vidas costó, ha quedado en el olvido y  todo ese esfuerzo se ha ido a la basura porque ha llegado al poder la oposición y fue lo mismo. Aunque actualmente MORENA esté como el PRI de esos años que ganaba todo, (hoy tienen el poder absoluto en todas las cámaras, como el PRI en su tiempo) de nada sirvió, de nada ha servido

En esa época el priismo que era el único partido con poder absoluto tanto en las cámaras federales como las locales, si alguien de oposición les pisaba los talones, buscaban la forma de quitarlo del camino, le buscaban algún delito o si no le hallaban, se lo fabricaban, por eso les decía al principio de la columna, que ir contra el PRI era tenerlos bien puestos, porque era casi firmar tu sentencia de muerte o mínimo ser perseguido político.

Y pese a que eran tiempos de bonanza presupuestal para el PRI, había que trabajar a favor de la gente, había que dar resultados, hacer más con menos, había pues competencia porque los opositores no eran fácil de roer, y como en esos años, que el sueldo aun no era atractivo, pero si había suficiente recurso para presupuesto, el gobierno en turno tenía -aunque sea a regañadientes- aplicar peso por peso en obras y servicios públicos, hacer más con menos, estirar el presupuesto, y la oposición era un vigilante serio del destino presupuestal.

Tiempos de mucha abundancia, en donde hasta Tecomán se ganó el nombre de la «Chequera verde del estado»  había recursos hasta para prestarle al estado, y no se diga pues, en ese transitar, la competencia política era un común denominador para que los gobernantes en turnos siguieran buscando cargos de elección o simplemente seguir dejando bien posicionado a sus partidos para futuras elecciones; ejercer una buena administración con logros y resultados, era  un aliciente para buscar otros cargos de elección  popular

En esa política de austeridad que en bendita hora se aplicaba o al menos para la oposición, trajo a los tecomenses y colimenses importantes beneficios, los regidores trabajaban y diariamente se encontraban en sus cubículos, atendiendo las peticiones ciudadanas, insisto, era parte de una competencia política en donde el que se «movía no salia en la foto», es decir, si no se veía trabajando no tenia derecho a buscar otro cargo. El sueldo no era obstáculo, incluso estaban conformes.

Pero la puerca empezó a torcer el rabo, cuando en futuras administraciones, personajes de otros partidos infiltrados en los de oposición, llegaron a tumbarlos de su macho, «mal asesorados» o siguiendo  línea priista, éstos empezaron a contaminar, pegándole en primer lugar a la austeridad, en donde se incluyó un primer incremento salarial para los regidores y diputados. Incluso fueron los panistas los primeros que de ser oposición ganaron alcaldías y ya como gobierno, dejaron por la paz la reducción del salario, lo que sus correligionarios antecesores habían impulsado y defendido por años.

Desde los años 2 mil, el salario de los diputados y regidores ha sido imparable,  en aproximadamente diez años (cerca de tres periodos municipales) ha tenido un incremento de un 80 %, (en los 90′ s se mantuvo), pasando de 5 mil pesos a 73 mil pesos hasta el día de hoy, mientras que el de los diputados pasó de 30 mil pesos y hoy  oscila entre los 180 y 200 mil pesos mensuales( si preside una comisión) A parte no hacen nada -y ojalá algún valiente me desmienta con cifras reales y documentos-

Resulta pues, lamentable y vergonzoso que se hayan alejado de la sociedad, pero que hoy que los legisladores de  MORENA tuvieron la gran oportunidad de aplicarse a un rigoroso plan de austeridad y echar para atrás los altos sueldos,  se pongan también de lado de la corrupción, de la simulación y en contra del pueblo que tanto luchó porque gobernara la izquierda y que a través de las siglas llegaran con la esperanza de que cumplirían con los compromisos antes descritos y hoy lamentablemente son parte de lo mismo.

Y para variar, en la época de los 90´s como se aplicaba un plan de austeridad, Colima logró avanzar en materia en infraestructura, obras y desarrollo social, en dicha bonanza presupuestal lograron cobijarse alcaldes casi hasta el 2009, de ahí en adelante el Estado se ha enfrascado en disputas políticas, precisamente por la lucha del control político y económico del estado. No se diga los altos sueldos y negocios millonarios que hacen a costa del poder. Mientras ellos se pelean el dinero y el control del mismo, nos tienen con cero obras y cero resultados. Es cuanto

BAJO LA LUPA

*Con bombo y platillos, aliados, festejaron el triunfo de Dolores González Meza como dirigente del SNTSA 30. La necesidad de conservar el trabajo y prebendas hizo que los trabajadores le llevaran al triunfo, así como también se debió a las promesas que les hizo de lograr más conquistas laborales. Si fue esa la razón, los trabajadores han salido ganando. Sólo falta que sea una ardua vigilante de la aplicación de los recursos para salud,  para que los cohetes alcancen para todos, de lo contrario sólo les tocará recoger las varas.

*Elías Lozano, alcalde de Tecomán necesita unas clases de política, insisto que la falta de tacto y sensibilidad, pero probablemente hasta de carácter, hasta el momento ha dejado lastimados y heridos en el camino hasta con los de su entorno. De no ser por la habilidad política de su tesorero Jesús Rojas Fermín y de algunos regidores (que si saben de política) ya tendría encima a gran parte de ciudadanos que acuden pensando en que Elías los va a recibir, atender y resolver, pero se llevan la decepción que los traen de arriba para abajo. Si no puede superar con algo tan sencillo, cuando se le vengan los grandes problemas sociales encima no me imagino lo que hará. Ojalá me equivoque, rogamos tener ya un alcalde apto y con capacidad para desempeñar el puesto. Es cuanto

*Y es que hace dos semanas aproximadamente un grupo de comerciantes establecidos del centro histórico, que llevan años ejerciendo la actividad en sus locales del mercado Cuauhtémoc, acudieron para entrevistarse con el alcalde Elías Lozano,  para solicitarle que ya no sigan dando permisos a diestra y siniestra al ambulantaje, pues debido a que quieren obtener ingresos, de manera irresponsable la dirección de Reglamentos y Apremios dirigido por el ex regidor emecista Gerardo Cruz Lizarraga, les puso a tanto ambulante que ya están invadiendo sus locales. Amparados por un permiso que la dirección les cobra diariamente como concepto de pago de plaza, se siente protegidos y con más derechos que los comerciantes establecidos y locatarios de dicho mercado.

Según el alcalde creyéndose astuto, no los recibió y los mandó con el secretario del ayuntamiento, éste los escuchó, pero no les ha dado respuesta. Lo única acción con que los quiso marear, es solicitarle al director de Seguridad que hiciera rondines más constantes, cuando su obligación es mantener vigilancia los 365 días del año, las 24 horas y en todo lo largo y ancho del municipio. Los comerciantes obviamente no se la tragaron. Para ellos, Elías sigue fallando a su palabra, el problema a resolver es retirar el ambulantaje de sus espacios.

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