En este mundo no hay nada seguro, excepto la muerte y los impuestos
Benjamín Franklin.
Javier Montes Camarena * Locutor y Periodista. <> www.enlacemanzanillo.com
Déjenme decirles que: En el caótico y desastroso Gobierno de José Ignacio Peralta Sánchez se avizora en los dos últimos años que le quedan, una situación peor que los cuatro años anteriores.
Con el despatarrado Nacho Peralta Colima ha tenido un panorama domestico realmente pésimo, horroroso y muy malo.
Contamos con un Gobierno estatal sin ideas y ocurrencias terribles y, con un supuesto liderazgo donde reina la incompetencia y la perversidad, misma, que en sus últimos cuatro años no ha demostrado, ni por asomo, la mínima capacidad de corregir, recapacitar o ajustar.
Lo suyo es otra cosa: La Corrupción.
En éste año 2020 ya se advierten, una vez más, retrocesos muy agravados que terminarán por sepultar a una administración estatal que ha navegado sin rumbo y en el caos, todo, porque nunca se han tomado la molestia de voltear a ver, tan siquiera de reojo, un diagnóstico realista de lo que pasa en Colima.
Nos queda claro que el panorama nacional registra un retroceso fatal para los mexicanos, sin embargo, el inútil y corrupto gobernante de Colima poco o nada ha hecho para salvarse o corregirse de esa dinámica negativa, al contrario, Nacho Peralta en sus cotidianas mentiras responsabiliza al Gobierno Federal del Presidente Andrés Manuel López Obrador de sus desgracias políticas, financieras y de seguridad.
Con un panorama sumamente complicado Colima arriba al 2020 con un gobernante ladrón, despistado, ausente, despreocupado, ineficaz y muy al tanto de los errores de otros para tapar, como los gatos, tanta mierda que ha generado eso que él llama, su Gobierno.
La inseguridad en Colima lleva ya muchos años fuera de control. El Gobierno de Colima está rebasado y si nos apuramos, hasta podría ser cómplice de los de enfrente.
Y los ciudadanos colimenses “apanicados” y muertos de miedo.
Este es el crudo diagnóstico de la situación delictiva en Colima y sus diez municipios, en especial el puerto de Manzanillo.
No es novedad. Estamos inmersos en una espiral de violencia sin precedentes.
El momento no puede ser más crítico ya que es la inoperancia de la autoridad estatal la que ha propiciado que el orden público se haya trastocado.
En éste contexto de descomposición criminal los últimos hechos del crimen organizado son dramáticos, situación que nos habla de que el ciudadano atraviesa por un completo estado de indefensión donde el Ejército, la Marina, la Guardia Nacional y los cuicos estatales y municipales parecen no tener la capacidad o la voluntad de enfrentar a la delincuencia, ésta sí, organizada.
En Colima cada día cada quien va teniendo la historia de la muerte de un familiar, del despojo, de violencia, de miedo, de pérdidas, de robos, de secuestros, de asesinatos de jovencitos por la prostitución infantil que se promueve y se ejerce desde el Gobierno estatal de Nacho Peralta, de anécdotas de supervivencia, de agradecer que tan solo fueron daños materiales, mientras se pondera no haber terminado herido o en una fosa.
Si usted no ha leído la prensa local de la semana, aún está a tiempo de evitárselo, hágalo por salud mental.
No enterarse no cambiará la realidad en la que vivimos los colimenses, si ya está más o menos enterado de lo que va pasando, sabrá que hemos rebasado la línea entre la vida y la muerte.
Quizá sea más cómodo asumir que calladitos nos vemos más bonitos, sin embargo, ahí está el desafío que las estructuras de los Gobiernos estatal y municipales del estado de Colima no han sabido cumplir y mucho menos erradicar los ataques flagrantes, directos y groseros del crimen organizado.
El problema en Colima es real, preocupante, ahí está y sigue presente todos los días y, ante la indefensión total, no se podrá enfrentar a los malos con “abrazos no balazos o el ridículo fuchi, guácala” que raya en una verdadera estupidez.
Pero hay quienes dicen en tono de broma, pero no exentos de sabiduría que hoy la Marina-Armada de México protege a delincuentes de “cuello blanco” proporcionándoles todo un convoy de marines para su protección cuando deberían ser investigados por ladrones y lavadores de dinero sucio.
Si miento señor Almirante Salvador Gómez Meillón hágamelo saber.
Usted tiene la palabra.
Ahí se ven.
ENLACITOS
Tapadera: La percudida diputada federal de MORENA Claudia Yáñez Centeno dice que no es “tapadera de nadie” …Pobre, a cada rato se muerde la lengua cuando todos saben que ofrece protección e impunidad a funcionarios federales portuarios a cambio de “favorcito$” para que puedan delinquir y robar a sus anchas.
Pruebas las hay.
<<<>>>
Don Fernándone dueño de vidas y haciendas: Lo que son el corrupto Gobernador José Ignacio Peralta Sánchez y el locuaz presidente municipal de la ciudad de Colima Leoncio Morán le tienen un miedo terrorífico a Don Fernándone Moreno Peña quien a diario sube a la banqueta su lujosa camioneta blindada.
¿Pos qué les sabrá?
Tan sólo en el año pasado 2019 el Gobierno del Estado de Nacho Peralta pagó, de los impuestos de los colimenses, más de 30 millones de pesos en salarios de los guaruras que protegen a Don Fernándone Moreno Peña del crimen organizado y de sus cuentas pendientes.
Y luego porque critican a los sinvergüenzas del PRI.
Estoy en: www.ipuntocom.mx – www.elobservadornoticias.com – www.pantallazoinformativo.com – www.diarioelvigia.com
Comment here