Carlos Ramiro Vargas
La irrupción de Morena como fuerza política en el estado de Colima, no ha traído nada bueno para la entidad. Con dos años en el poder, Indira Vizcaíno y su gabinete, han sido incapaces de realizar mejorías substanciales para la población, en lo que se refiere a los principales rubros de gobierno, y en cuanto a las necesidades sociales más sentidas por los 750 mil habitantes de esta tropical Finisterre. Antes por el contrario.
Pues la economía estatal en su conjunto en lo que va del 2023 ha decrecido un 4.7 por ciento, siendo que en los últimos cinco años el desarrollo promedio de nuestra economía es de un 0.35 por ciento anual, según datos de la organización, -Cómo Vamos México-; haciendo de Colima la economía 30 de entre las 32 entidades federativas de la nación, con crecimiento económico negativo.
Otros logros destacados de Morena en el poder, ubican a Indira Vizcaíno, gobernadora, como la segunda peor mandataria estatal en todo el país, peleando palmo a palmo el sitio de honor del peor gobernador mexicano, con David Monreal, también morenista y titular del poder ejecutivo en Zacatecas.
Y para que no se diga que Colima no destaca a nivel mundial, el área conurbada Colima/Villa de Álvarez, tiene ya el primer lugar internacional como la zona más peligrosa y violenta del mundo, con un índice de 188 asesinados por cada cien mil habitantes.
Y con un índice de impunidad del 99 por ciento.
Cuestión que tiene sin cuidado a Margarita Moreno y Tey Gutiérrez, flamantes alcaldesas prianistas de los municipios de Colima y Villa de Álvarez.
En rubros como sanidad, educación, el desabasto es mayúsculo en insumos y material médico en la Secretaría de Salud, y el retroceso en materia educativa con la destrucción de las escuelas de tiempo completo que afectó a 40 mil niños colimenses, tiene sin cuidado a Indira Vizcaíno, gobernadora, quien prefiere gastar 400 millones de pesos en publicidad con tv Azteca y Televisa, que en la compra del instrumental médico insuficiente o en la restitución de las escuelas de tiempo completo.
Ante la postura abyecta de los secretarios respectivos, sea en Salud o en Educación, donde Adolfo Núñez titular de esta última festejó la desaparición de las escuelas primarias de tiempo completo, mientras ahora gurda un silencio cobarde ante los errores inaceptables cometidos en los libros de texto gratuitos, más preocupado por cuidar su hueso que de defender el derecho de los niños colimenses y mexicanos, para tener una educación de calidad creciente.
Pero si bien es cierto que Indira Vizcaíno heredó un gobierno inexplicablemente endeudado en grado sumo, con 13 mil millones de pesos en débito, para el año 2021; producto de la corrupción sin nombre del ex gobernador priísta, Ignacio Peralta y gabinete, que dejó además al gobierno de Colima en quiebra institucional y oficial, ante la banca privada, la verdad es que Indira gobernadora y sus diputados locales, nada han hecho para llamarlo a cuentas, ni para obligarlo a regresar lo robado y para aplicarle juicio político y penal, con la respectiva extinción de dominio de todos sus bienes malhabidos.
De tal modo que medidas impulsadas por el presidente AMLO, como la institución para regresar al pueblo lo robado son letra muerta en Colima, como lo es el quitarle la pensión a los ex gobernadores en concordancia con lo hecho por el gobierno federal, respecto a los ex presidentes.
En los hechos, el gobierno morenista de Indira Vizcaíno es la continuidad perversa del mandato reaccionario enemigo del pueblo, del neo liberal radical, Ignacio Peralta, hoy flamante dirigente priísta nacional, amparado jurídicamente contra cualquier posibilidad de juicio penal en su contra.
Pues aunque el daño hecho por Ignacio Peralta y el PRI al estado de Colima no tenga parangón en nuestra historia moderna, por si fuera poco, el grande problema de las pensiones estatales lejos de resolverse se complica día con día, y el desfalco por mil, 600 millones de pesos en este rubro, realizado también por Ignacio Peralta y gabinete, está lejos de solucionarse y menos, con la imposición por parte de Indira gobernadora, de un priísta corrupto como Hugo Vázquez Montes, al frente del Instituto de Pensiones del estado de Colima. Pese a las protestas del sindicato de trabajadores al servicio del gobierno del estado.
Con el agravante de que una parte muy importante del presupuesto gubernamental colimense, se va al pago de una deuda pública espuria equivalente a 400 millones de dólares, que debería ser considerada ilegal e ilegítima por parte de una gobernadora que presume de ser socialista y de estar al lado de los más necesitados, pero que da una continuidad perruna a los podridos compromisos de su antecesor en la gubernatura.
En lo que respecta a la política ecológica, esta es absolutamente inexistente sea en el discurso o en la práctica del gabinete indirista, mientras los ayuntamientos siguen depositando decenas de toneladas de deshechos tóxicos diariamente en basureros a cielo abierto, y los manglares, ríos, lagunas y escasos bosques estatales, continúan sufriendo de tala excesiva y cambio de uso de suelo orientados a la explotación capitalista salvaje.
Por otra parte, el terror del paramilitarismo narco/criminal, sigue sometiendo a los colimenses en el peor horror de sangre y dolor sufridos jamás en nuestra historia contemporánea, pues cada mes en el 2022 hubo un promedio de 74 asesinatos a balazos, mientras en el 2023 dicho promedio es de 73 y medio.
Aunque la gobernadora Vizcaíno afirme que semejante vorágine de crímenes impunes va disminuyendo, ante la absoluta inutilidad de la eufemísticamente llamada Mesa de Construcción de Paz. Como de la Fiscalía y la Procuraduría de Justicia estatales.
Como nunca pues en nuestra historia, el pueblo de Colima está absolutamente solo. Sin un poder ejecutivo competente y solidario, con un congreso local compuesto de imbéciles cínicos y abyectos, enemigos del pueblo, y con un poder judicial aliado por omisión e indolencia al narco/paramilitarismo que cada día se va adueñando de las calles y la vida social y económica de nuestro estado.
A ver hasta dónde y hasta cuándo…
Carlos Ramiro Vargas. Stockholm, Sweden. A 16, 07, 2023.
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