Observador Político
Belisario Romero Sánchez*
Si la justicia les llegara al noble y aguantador pueblo de Colima, estuvieran en prisión el grupo de socios del ex gobernador de Colima, Ignacio Peralta Sánchez, que después de saquear las finanzas y comprar bienes, negocios y propiedades con dinero del pueblo, invirtieron y viven en Mc Allen Texas bien felices y seguros. En esa lista no sólo figura Nacho y el principal operador Carlos Alushe” Noriega García, si no una gavilla de socios que estuvieron en el gabinete, cercanos incluso hasta de la oficina del ex titular de Finanzas. Por si se preguntan en dónde está invertido el dinero del noble y aguantador pueblo de Colima, en este espacio les daremos unas señales de la ruta del dinero.
Quien fuera su principal operador del clan, ex titular de finanzas y hoy diputado local priista, Carlos “Alushe”, García Noriega, leyendo una de las noticias donde aparecía como nota principal de que había sido citado a comparecer ante un juez por el delito de desvío de recursos, carcajeándose como acostumbra; reírse del pueblo, se fue de boca y dijo a los presentes, que, si era pasión que se les borrara porque no se les cumpliría el deseo de verlo en el bote, como lo anhelan los colimenses.
Agregó desde su ronco pecho que, en caso de no se diera el proyecto de reelección con su esposa, Elia Margarita Moreno a la alcaldía de Colima, concluyendo ambos su periodo en la alcaldía y diputación local respectivamente, terminaría también al igual que sus socios; viviendo en Mc Allen Texas, para disfrutar y crecer su riqueza obtenida bajo el amparo del poder.
Dentro de ese grupo beneficiado de las finanzas estatales, figuran otros personajes que, según ellos, les ha funcionado andar con perfil bajo para no levantar sospechas o reclamos de la sociedad, como el caso de quien fuera intimo amigo del ex gobernador ladrón, un tipo llamado Carlos Malcher, en ese entonces Agustín Morales, quien fuera secretario de Desarrollo Rural, lo benefició directamente por instrucciones del entonces gobernador.
Carlos era un tipo sin presencia, sin recursos, pero que la suerte le cambió al llegar al poder su amigo Nacho y éste para poder ayudarlo e inyectarle recursos para beneficiarlo, encontró el camino para llegar y fue a través de lo que Carlos Federico Malcher Moreno, conocía y manejaba bien: la producción de coco y derivados.
Allá por el año 2016 la desaparecida Sagarpa, donó a la entidad un millón de palmas de coco para poblar más de 4 mil hectáreas en Colima, era un apoyo para 853 productores de coco, mismas que le fueron entregadas el 100 % a Carlos Malcher, sin entregar una sola palma a otros productores. Fue entonces como a partir de ahí empezó el crecimiento de su fabrica y empresa de industrializar coco y sus derivados en donde Peralta Sánchez obviamente es uno de los socios.
También figura otro personaje que le tocó despacharse con la cuchara grande como funcionario estatal, se trata de Walter Oldenbourg Ochoa, quien fuera secretario de Fomento Económico en el periodo de Nacho Peralta. Este tipo realizó un millonario fraude en La Manzanilla Jalisco, que le deja millones de pesos de ganancias mensuales, obviamente este fraude fue orquestado por el ex secretario de Nacho Peralta nada más y nada menos que el corrupto Walter Oldenbourg Ochoa.
Walter no se anduvo por las ramas ni tuvo compasión del dinero de los colimenses, utilizando sus relaciones y contactos, buscó la forma de adjudicarse dicha propiedad en zona federal, ubicada en Costa Alegre del vecino estado de Jalisco, llamado La Manzanilla, en donde construyeron un complejo turístico denominado Aldea Coyaco, es un fraccionamiento construido en una zona muy exclusiva en donde también se construyó un hotel de cinco estrellas.
Además de restaurantes que compró, uno de ellos por la Ignacio Sandoval, que junto con otro ex funcionario estatal, Kristian Meiners, ex secretario de Administración y Gestión Pública en el gobierno de Nacho Peralta, el ex gobernador más ladrón y corrupto que haya tenido Colima.
Su paso por la ex secretaria de Administración, le dejo muy buenas ganancias a Kristian Meiners pues al estar pegado a la oficina de Carlos “Alushe” Noriega García, todos los movimientos que éste hacía, eran aprobados por el esposo de Margarita Moreno, que desde la oficina de Finanzas vigilaba que no se le escapara ningún peso, como producto de las ganancias que hasta su oficina le reportaban sus socios.
Kristian desde luego llevaba gran porcentaje, a tal grado que le dio para poner restaurantes y una cervecería artesanal. Uno de los restaurantes que se ubicaba por la calle Ignacio Sandoval lo cerraron y otro que se ubica por la zona centro lo traspasaron.
Todo ese grupo y los que me faltan pero que serán motivo de plasmarlos en otra columna, se despacharon con la cuchara grande y a los cuatro vientos lo gritan, lo presumen. Tienen inversiones en las tierras extranjeras ya mencionadas, en donde se reúnen para brindar por su próximo triunfo en la política colimota.
Desde una pista en Mc Allen a Colima, despega a cada rato un avión privado, propiedad de un empresario citricultor tecomense, que tiene parentesco con el ex gobernador más ladrón que haya tenido, que Colima. Son viajes de placer y negocios, se reunen en las tierras estadunidenses para brindar por el gran exito en los negocios comerciales y de la política corrupta que realizan en Colima.
Incluso desde hace tiempo se encuentra en Mc Allen Texas quien fuera alcalde de Colima por el PAN, Héctor Insua, que abandonó la regiduría en el periodo de Locho Morán para irse a atender uno de los negocios que tiene ese grupo de nuevos ricos de Colima. En donde Nacho Peralta es uno de los socios mayoritarios.
Falta mencionar el dineral que entre Nacho Peralta y Carlos “Alushe” tienen guardados en efectivo en domicilios particulares, que por el momento no sacan para no despertar sospechas, además porque se encuentran muy ocupados haciendo negocios desde la alcaldía de Colima, en donde parte de esa gavilla de rufianes siguen trabajando, haciendo negocios y desviando los recursos como lo saben hacer muy bien. Obviamente con el aval de la presidenta municipal Margarita Moreno, que, por no deslindarse de los sucios negocios de su esposo, tuvo que cargar con el lastre y se perjudicó políticamente. Es cuanto
Soy abogado y periodista*
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