Opinión

El despótico y el crítico

Tres cosas no pueden ocultarse mucho tiempo: el sol, la luna y la verdad

    Buda.

Javier Montes Camarena* Locutor y Periodista <>  www.enlacemanzanillo.com

Déjenme decirles que: Dice la Constitución Política de Los Estados Unidos Mexicanos que los “periodistas tenemos derecho a información veraz, plural y oportuna”.

Tratar de silenciar al periodista crítico nace del miedo del o, de los funcionarios públicos ladrones, corruptos, mentirosos. El funcionario público llega al puesto público y trata de manejar las ideas y la información para beneficio propio y, de quienes le acompañan en la corrupción.

Hoy, a los periodistas incómodos se les quita el micrófono, la cámara o la pluma. Una consecuencia de la concentración de un poder efímero y, la escasa pluralidad y crítica.

Todo esto lo recuerda el Artículo 19, esa relación de complicidad la refuerza el despótico con la publicidad oficial. La pauta publicitaria es la zanahoria y el garrote que atenaza a un buen número de estaciones de radio, prensa, revisteros, periódicos en línea, reporteros y periodistas que pasan por su chayote a las oficinas del autoritario.

Ejercer el periodismo o la crítica libre, es, un hecho heroico. En lo que va la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador han sido asesinados 12 periodistas.

Y muchos más somos reprimidos, amenazados, censurados y, hasta demandados para callarnos.

Justamente es la evaluación del despótico funcionario público, la lectura política lo tipifica como una administración clásica que precisa de Cortesanos.

La función del “cortesano” es halagar al omnipotente despótico y recibir, a cambio, sus favores, las cenas opíparas, los sobrecitos con dinero, los viajes pagados; todo, todo con cargo al erario público federal.

No entiendo a esos “chayoteros” que no van a estar ahí a la hora del derrumbe del autoritario, ya lo veremos en su loca carrera rumbo a la guillotina clamando y vociferando en contra de sus Cortesanos que le impidieron ver claro y, a tiempo.

Tocqueville decía: “Creo en la prensa crítica más por los males que evita que por los bienes que procura”.

Desde luego en una sociedad como la porteña es insoslayable el deber del periodista crítico en cuanto a divulgar las noticias o los comentarios que proporcionen todos los elementos necesarios para contrarrestar los excesos del poder.

Más todavía cuando la historia diaria plantea desvío de contratos en los puertos de Manzanillo, Altamira, Veracruz, Lázaro Cárdenas y Dos Bocas como lo ha detectado la Secretaría de La Función Pública del Gobierno Federal.

Los periodistas libres e independientes siempre estaremos en el bando de los indefensos. Hoy, somos sometidos a un acoso metódico y sistemático que tal vez podría reunir los requisitos para una variante de “terrorismo portuario”.

En el México de la “Cuarta Transformación” se continúa demandando al periodista crítico, se le persigue, se les acosa, porque el autoritario sabe qué, con unos cuántos pesos nada le pasará.

Como fue el caso muy sonado de intento de asesinato del despótico en cuestión que compró la justicia estatal y, su caso fue archivado, sin haber obtenido el perdón de quién fue encañonado con pistola en mano por el autoritario.

¿Se le podría adjudicar a la “Cuarta Transformación” los desencuentros corruptos del funcionario público que atosiga a un periodista libre y crítico por sus escritos?

Consagrada desde muchos puntos de vista como una de las condiciones indispensables para la vida civilizada (es decir democrática)

La Libertad de escribir, de ideas, pensamiento, expresión, prensa, divulgación, comercio, creación e industrialización de las obras relacionadas con ella, por ello, la comunicación humana tiene hoy, tantas interpretaciones como protagonistas.

Tengo 50 años en el periodismo radiofónico y escrito, hoy nos amenazan, nos demandan para que nos quedemos callados. No. No va a ser así.

Ahí se ven.

ENLACITOS

Moralmente derrotados: El PRI de Colima sigue con los mismos vicios y, los mismos políticos con mala fama pública que se creen dueños del partido, ni el Gobernador José Ignacio Peralta Sánchez y, mucho menos, quien ha entregado malas cuentas políticas como delegado del PRI nacional como Don Fernándone Moreno Peña son el revulsivo que requiere un muerto.

Bien decía mi abuelita Maricoles: Te fuiste horcón de en medio.

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Gobierno Corrupto: Lo hemos dicho siempre, el Gobierno del Gobernador Nacho Peralta siempre ha navegado en la mar de la corrupción, hoy, lo tiene en la mira la Secretaría de la Función Pública por ejercer 900 millones de pesos en forma irregular.

Amén de los 900 millones de pesos que no ha enterado al Instituto de Pensiones.

Estoy en: ipuntocom.mx – elobservadornoticias.com – pantallazo.com

 

 

 

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